No soy psicológica, ni médica, ni nada por el estilo, pero sé apreciar cuando algo me sienta bien, tanto a nivel de salud como de ánimo y bienestar. Por eso, hoy os hablaré de 30 efectos muy positivos que viajar tiene en mí. Vividos y experimentados en primera persona las suficientes veces como para saber que no es una casualidad. ¡Viajar sienta de maravilla! Acompañaré los efectos de la misma cantidad de expresiones gráficas o imágenes donde poder sentir estas cosas.
Nota: muchos de los gifs son imágenes de la serie Skins, icónica donde las haya. De paso, os la recomiendo.
Madrugar no te cuesta ni la mitad
Andas más de lo normal. ¡Y andar es buenísimo!
Ver la luz del día más tiempo de lo habitual es bien. Es muy bien.
Poder emplear el tiempo en algo no impuesto -no como trabajar 8 horas al día- da una sensación de libertad MUY PLACENTERA.
En muchos casos, afrontas situaciones que te dan respeto (miedo, vaya). Te superas.
¡Te hace feliz! Y no tienes claro qué es la felicidad. Pero si existe, se parece a lo que sientas cuando viajas.
Viajar te hace recuperar energías. Será por el cambio, por parar de trabajar, por el break … pero al volver te sientes más animado. Fuerte. Con ganas de empezar.
¡Te lo pasas bien! Seguro que recuerdas pocos viajes malos…
Te hace tomar distancia de las cosas. A veces, vivimos demasiado encerrados en nuestras propias circunstancias. Es inevitable. Y viajar te hace alejarte de tus pensamientos habituales; plantearte las cosas de otra manera
Aprendes cosas. De historia, cultura, religión… aprendes muchas cosas de los países y las regiones que visitas
Aprendes geografía. Parece algo básico, pero está muy bien.
Espabilar; activarte… Viajar supone adquirir responsabilidad a la hora de comprar billetes de avión, hoteles, actividades, etc. Y eso te hace estar alerta, buscarte la vida… en una palabra: espabilar. 
Viajar te une especialmente a tus compañeros de viaje. Los viajes se componen de cientos de momentos, con gente especial, y ello supondrá con el tiempo recuerdos para siempre.
¡Emoción! ¿Hay algo mejor que ese cosquilleo, esa ilusión… que provocan las cosas que más nos gustan? 
Motivación. Las cosas que nos emocionan nos motivan. Y las aficiones son razones para exprimir el tiempo. Por eso, pocas cosas gustarán más que preparar un viaje, disfrutar de sus momentos y las fotos que los retratan, pensar en futuros viajes, abrir el mapa e idear…
