¿Cómo me muevo por Ámsterdam? ¿Cuánto dinero necesito? ¿Qué debo ver sin lugar a dudas? ¿Cuántos días necesito para verlo todo? Intentaremos resolver estas dudas y hacer repaso a las cosas de interés general sobre un viaje a la capital holandesa que podrían resultar útiles para otros viajeros.
Días/recorrido
En dos o tres días Ámsterdam se recorre fácilmente, por lo que estos días son suficientes para lo que es la ciudad. Luego hay excursiones a pueblos cercanos o al Parque Keukenhof que pueden añadir una o dos jornadas. Si se cuenta con más tiempo, ciudades como Utrecht y La Haya son también interesantes.
Cómo moverse
El principal medio de transporte turístico en la ciudad es el tranvía. Vertebra sus calles y llega a todos los puntos importantes de la ciudad. Por otro lado, tanto para ir y venir en tren desde el aeropuerto como para las excursiones de alrededores, todo empieza y acaba en la Estación Central, pegada al mar.
Además, al menos un día te aconsejo que alquiles una bici (cuestan 10 euros para todo el día) y te sientas como un local, ya que para ellos es un medio muy común. No es peligroso y es bastante práctico para moverse, pues la ciudad es bastante fácil para moverse por ella. Yo la cogí un día y no me perdí una sola vez, utilizándola para ir al Museo del Cine, al principal parque de la ciudad o la oficina de Policía.
Hay una opción que incluye transporte público gratis y el acceso a museos y un total de 30 actividades gratis. Se trata de la tarjeta I amsterdam Card y cuesta: 42 euros para un día, 52 para dos y 62 para tres.
Presupuesto
Ámsterdam no es una ciudad barata. Tampoco quizás excesivamente cara, pero me inclinaría a incluirla más fácilmente en el primer grupo. El avión desde España ronda los 200 euros, que no está mal del todo, pero hay que contar con unos 30/40 euros por habitación si no queremos compartir habitación con más personas.
No hay hostales baratos como por ejemplo en Berlín y la siguiente opción a un hotel familiar es un albergue, donde hay que compartir habitación. Por tanto, el alojamiento va a resultar caro comparativamente con otras ciudades.
A la hora de comer, no os puedo decir mucho porque me llevé comida de España y las veces que cené fuera, elegíamos depediendo del precio. Se pueden encontrar kebaps, pizzerías o comida callejera asequible, así que esta es la parte por la que más se puede evitar gastar mucho dinero.
En cuanto a las actividades, también me pareció algo caro. Quizás la percepción viniera de que no distinguen estudiantes de adultos en cuestión de tarifas. Tienen distintos precios según el museo: el Museo Van Gogh cuesta 14 euros, el Rijksmuseum 15 euros, la Casa de Ana Frank 9 euros y otros museos como el Erótico, 6,5 euros.
Datos generales
El Ayuntamiento de la ciudad cobra una tasa turística que se establece en un 5% de cada noche de hotel y se cobra en la primera noche. Por otro lado, hay muchos establecimientos que ofrecen información turística gratuita y que también venden los tickets de las principales atracciones de la ciudad y alrededores.
Es lo único destacable en una ciudad fácil de recorrer, donde hablan inglés, la gente es muy maja y merece mucho la pena.
Si os interesa, podéis consultar el recorrido que hicimos en cinco días, los atractivos principales y todos los encantos de la ciudad en la siguiente pista: Ámsterdam.
