Qué ver en Monterrey y Carmel By The Sea: buen vivir en la costa californiana
Irene 8 mayo, 2019Si eres de aquellos que piensan que en los lugares pequeños es donde a veces se aprecia mejor el carácter de la gente y estás preparando un viaje por Costa Oeste, no debes dejar de acercarte a la Bahía de Monterrey y las ciudades que conforman este pequeño paraíso de buen vivir en la costa californiana. En ellas, tendrás la oportunidad de disfrutar de forma relajada de los encantos del estado de la eterna primavera. Tras conocer Santa Cruz, hoy os hablaremos de Monterrey y su vecina, Carmel By The Sea, mostrándote los lugares que ver y disfrutar en estas dos ciudades.
Ambas están situadas a unas 115 millas de San Francisco, lo que en coche es poco más de dos horas (casi tres con tráfico). Nosotros llegamos a la zona directamente de Yosemite y me encantó el contraste máximo de pasar de estar perdidos entre grandes pedruscos a disfrutar de la vista marina. Nuestra idea era poder estar más tiempo en la zona y bajar más al sur, donde poder conocer en mayor medida el ‘Big Sur’, pero finalmente solo llegamos al Bixby Creek Bridge, cuya vista también nos maravilló.
Monterrey tiene unos 31.000 habitantes y además de pequeña, todos sus lugares interesantes se concentran en torno a la playa. Por su parte, Carmel By The Sea es una ciudad encantadora, de un nivel económico bastante alto y muy diferente al resto de lugares de la zona, por lo que no te lo debes perder.
Monterrey: la vida normal de la ciudad
Nuestra intención en Monterrey era pasear por la ciudad, encontrar algún escenario de Big Little Lies y dejarnos llevar sin más. Y aunque finalmente hicimos algún plan más, no esperéis un lugar lleno de actividades. También os digo otra cosa: A veces no se necesitan. A veces el mejor plan es no tener plan porque en esos momentos es cuando a veces más abrimos los ojos y sobre todo, cuando reparamos en la cotidianeidad de los lugares. Y esta es cada vez más el objetivo de mis viajes.
Pero tampoco os faltarán los ingredientes más comunes de las ciudades de la zona, suficientes para un día alegre empapados de ambiente estadounidense. Véase: un embarcadero lleno de restaurantes, tiendas y gente; con bases de madera donde aguardan poblaciones de lobos marinos a los que mirar embobados durante horas; buen tiempo; y el mar, siempre guiando nuestros pasos.
Eso sí, la playa de Monterrey me pareció bastante fea. Con arena gris y agua turbia… para disfrutar de una buena playa, lo mejor será acercarse a Carmel By The Sea, pero le llegará su turno luego.
Monterrey: la ciudad de Big Little Lies
Uno de nuestros mayores deseos era conocer los escenarios de la serie Big Little Lies, aclamada serie de televisión que nos había dejado el gusanillo sobre los sitios donde había sido rodada. En Monterrey podréis ver uno de los lugares donde sus protagonistas, mujeres entradas en los 40 y con una vida acomodada, toman café a diario. El bar, llamado Paluca Trattoria, está en el muelle principal, el Old Fisherman’s Wharf, y el lugar incluso tiene un cartel que presume de ello.
En realidad las escenas fueron rodadas en interiores; escenarios que recreaban este lugar. Pero ahí está la magia del cine y es que cuando ves el café es idéntico. Y como buena cinéfila me hizo bastante ilusión estar allí y hacerme la foto.
Otro de los escenarios de Big Little Lies que visitamos en los alrededores de la ciudad fue el puente Bixby Creek Bridge. Es un popular mirador que ofrece unas vistas espectaculares de la costa, los acantilados y el puente. Llegamos justo en la hora del atardecer y tuvimos la suerte de encontrarnos con uno de esos ocasos que te quita el aliento, viviendo uno de esos momentos que se te quedan pegados al cuerpo hasta mucho tiempo después.
Por último, muchas de las casas de las protagonistas de las series, de unos cuantos puñados de dólares, se encuentran en Carmel Highlands, en las afueras de la pequeña ciudad de Carmel By The Sea, de la que hablamos un poco más adelante.
Avistamiento de ballenas en la Bahía de Monterrey
Uno de nuestros deseos en este viaje era hacer un avistamiento de ballenas y esta parada de viaje era idónea para ello. Justo frente a la bahía, hay un cañón con aguas frías y lleno de alimento que hace que haya ballenas todo el año. El recorrido cuesta 50 euros y dura unas dos/tres horas y aunque es un poco pesado porque hay que ir tras ellas y tener suerte… nos hizo bastante ilusión hacerlo.
El ritual es divertido. Ves cómo la ballena expulsa agua; después te emocionas y miras; y finalmente, la mayor parte de las veces veces tan solo una parte del animal. Pero sigues emocionándote una y otra vez. Quizás esperando ver más parte del animal…y nada. No pasa. Pero sigues emocionándote…
Carmel By The Sea: la ciudad donde no hay luces de neón
Carmel By The Sea tiene censadas cerca de 4.000 personas y no quiero imaginarme el sueldo medio de sus habitantes. El paisaje es una amalgama de casoplones, cada cual mayor y más bonita que la anterior, de estilo europeo y sin los típicos locales de comida rápida y luces de neón. De ello se jactan y la verdad es que llama muchísimo la atención este hecho y el estilo completo del lugar.
Entre sus curiosidades, Carmel By The Sea cuenta con que Clint Eastwood fue su alcalde en los años 80 y de hecho, el aclamado director de cine sigue viviendo allí. También ha sido lugar de residencia para muchos famosos como Charles Chaplin, Kevin Costner, Rupert Murdock, Kim Novak, Doris Day o Brad Pitt.
Pero sin duda lo que más me gustó fue la playa, extensa y con una arena blanca preciosa: Carmel Beach. Aunque era octubre y el agua tenía pinta de estar demasiado fría, paseamos por ella y disfrutamos mucho de que el agua alcanzara nuestros pies. Al final del día, contemplamos un bello atardecer y abandonamos el sofisticado lugar maravillados con su entorno, las Carmel Highlands, donde hay también casas de primerísimo nivel.
Otros datos de interés en Monterrey
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- Monterrey fue la primera capital del estado de California, desde 1777 hasta 1849.
- Su economía está basada fundamentalmente en el turismo y en la pesca.
- Parte de México en el pasado, comenzó a formar parte de EEUU tras la Guerra Mexicana-Estadounidense en 1848.
- Está hermanada con su ciudad homónima, Monterrey, en México. Cuidado cuando consultes el tiempo en la ciudad, no te vaya a pasar como a mí y te confudas.
- Nosotros no fuimos, pero puedes visitar el Acuario de la bahía de Monterey, que sobrevive en gran parte gracias al agua del océano, que se logra a través de tubos que bombean de forma continua
Datos prácticos en Monterrey
–Dónde dormir: nos alojamos en el Hotel Days Inn en Monterrey y fue sin duda uno de los mejores moteles donde estuvimos. Cualquier persona que lo viera y no tuviera idea, no creo que creyese que es un «alojamiento de carretera«. Amplísimo, nuevo, limpio, con un personal súper amable, buenas vistas… fue sin duda una elección segura. Además, de los más baratos (unos 70 euros).
–Esta fue una de las últimas paradas de viaje, tras pasar por Las Vegas de forma rápida, recorrer durante día y medio el Gran Cañón, visitar algo fugazmente Monument Valley, Page (para ver Antelope Canyon y la Horseshoe Bend), también Death Valley y, giro total, casi dos días en Yosemite. Veníamos justo de Santa Cruz y nos quedaría tan solo San Francisco. ¡Un viajazo total del que os recomiendo cada parada!
Comments (2)
¡Osti titi! ¿Los leones marinos son en Monterrey? Nosotros no la visitamos en nuestra escapada a la Costa Oeste, pero ahora que he visto la serie pues oye,¡me hubiera frikigustado! ¡Carmel nos gustó mucho pero había una niebla tremendísima! A mí también me pasa que disfruto con la cotidianiedad de los lugares! Besitos guapiiii
Sí, majaaaa!!! los hay aquí, en Santa Cruz, en San Francisco… están por tolos laossss!!!! fue guay la visita. Son lugares donde parece que se vive muy bien. No me importaría nada probar a vivir por allí 🙂
muakaaa
Ire